En el 2020 justo en pandemia, atrapada en El Salvador, escribí este artículo, el cual he editado y agregado contenido. Hoy quiero volver a compartirlo con ustedes.

En el 2020 vivimos un periodo lleno de incertidumbre, pero también lleno de ansiedad y leí en redes sociales muchos memes sobre el peso ganado en esos días.

Ejemplo: “Una ranita panzoncita le dicen: ¡Felicidades! ¿Es niña o niño?… y la ranita dice: ¡Es Pan!“ y nos reímos porque creemos que tenemos licencia subir de peso, dado el momento de confinamiento que estamos viviendo, el problema que estamos pasando o la soledad; pero me pregunto: ¿es normal dejar sin control nuestro dominio propio?, y es que estando en casa tenemos más a la mano la comida, golosinas, frutas, dulces o el famoso pan dulce y es difícil regular la ansiedad.

Pero entonces, ¿será que para vernos lindas y saludables debemos estar siempre delgadas? Son muy comunes las dietas, mucho ejercicio, complementos nutricionales y consejos para bajar de peso… hasta jabones, cremas, pastillas para quemar grasa y no olvidemos las famosas cirugías para tener el cuerpo perfecto.

Me impresionó el anuncio que se publicó en los años 1950 y frases de esa época como: “Los hombres no me miraban cuando estaba flaca, pero desde que gané 10 libras tengo todas las citas que quiero…”

WAOOOO!!! en esa época me hubieran animado a subir de peso! Y la razón por la que no subía de peso era porque tenía problemas de la tiroides o porque vaya usted a saber yo no hubiera podido subir de peso… estaría catalogada como una ¡chica fea!, entonces solo las “gorditas” eran lindas.

Los cánones de belleza han cambiado en muchas décadas, ejemplo en la:

  • PREHISTORIA se consideraba un icono de belleza a los cuerpos con muchas redondeces
  • ANTIGUO EGIPTO triunfaban los cuerpos estilizados
  • El Siglo XIII La mujer era comparada a una rosa, de frágil y delicada belleza.
  • 1930 el ideal de belleza consistía en una cintura delgada y caderas anchas
  • 1940 cuerpos sanos y delgados.
  • 1950, las mujeres se lucían con anchísimas caderas, con largas y voluptuosas piernas y pecho en abundancia
  • 1960 cuerpo delgado y con apariencia andrógina, muy distante a la femineidad de épocas anteriores.
  • 1970, cuerpos delgados y bronceados
  • 1980, cuerpo delgado y tonificado
  • 1990 surgieron las modelos extremadamente flacas
  • 2000 En este milenio, llegamos a lo que hoy se conoce como “la mujer perfecta” que consiste en una mezcla de todas las anteriores: alta, delgada, con pechos grandes, caderas pronunciadas y cuerpo tonificado.

Ahora, ¿cómo realmente debe ser el cuerpo perfecto?

En una publicación de la revista virtual (Marcianos) publicó que la modelo y actriz Kelly Brook tiene el cuerpo perfecto, y al verla es una mujer que nunca se realizó una cirugía, tiene algunos rollitos, busto grande, piernas gruesas y en algunas fotos se les nota algo de celulitis… pero lo que la hace perfecta es lo NATURAL, pues se ve muy saludable y su cara refleja felicidad. Cuentan que en el colegio se reían de ella por ser muy gordita.

Muchas se preocupan por querer tener ese cuerpo delgado y perfecto con medidas 90-60-90, pero “Las medidas perfectas de una mujer no deben ser números, sino equilibrio” … Sí mis queridas, el equilibrio entre su autoestima y sus sueños, entre su salud y su vanidad, entre su estructura corporal y sus anhelos, entre su comunicación y su proyección.

¡Todas anhelamos vernos bien y dominar nuestro apetito… vencer esa debilidad por la comida, personalmente lucho con esos maravillosos postres y especialmente el chocolate negro!… que rico!, pero mientras no estemos consientes lo que Dios quiere de nosotras, lo que significa nuestra salud y que quiero proyectar no podremos llegar a aceptarnos. No es excusa que por la pasada cuarentena o la ansiedad descuidemos nuestra salud porque puede ser que un día Dios nos pida cuentas de lo que hicimos con el cuerpo que nos dio.

Acepta tal como eres, si eres gordita, delgada, alta, bajita, morena, clara… solamente cuida tu cuerpo por salud, bienestar, inclusive por imagen, porque con tu cuerpo estás comunicando todo el tiempo y proyectas lo que predicas con tu boca. Tu cuerpo es tu tesoro y como tal debes apreciarlo… porque nadie lo hará por ti.

Valórate para que tu autoestima suba… ¡No te critiques! Mira lo bello que tienes y poténcialo.

Valídate para que puedas ser influencia a las demás, comenzando con tu casa, tu familia, tus amistades y todos los demás.

Soy Carmen Portillo

Asesor de Imagen @blissbycarmen